Max Puig considera Danilo Medina gobierna “a paso de tortuga”

El presidente de la Alianza por la Democracia, doctor Max Puig, definió la gestión del presidente Danilo Medina como un “gobierno tortuga”, caracterizado por la lentitud en la toma de decisiones.

Puig dijo que el mandatario insistió en que necesitaba un Presupuesto General del Estado amplio y flexible, y así fue aprobado. Sin embargo, aplicó luego ajustes severos que frenaron de golpe la actividad económica teniendo esto como resultado un crecimiento cero de la economía nacional en los primeros tres meses del año.

“La errática gestión económica del gobierno ha tenido como resultado una ralentización de la economía, convirtiéndose en un gobierno tortuga en el que los recursos fluyen como suero de miel de abeja”, sentenció.

Puso como ejemplo, el descontento de muchos micros, pequeños y medianos empresarios que se quejan por la lentitud en recibir respuesta a sus solicitudes de préstamo, pese a que el propio gobernante anunció un plan especial de financiamiento a las mipymes por diez mil millones de pesos.

Precisó que pese a poner en marcha el programa crediticio de la cantidad de dinero inicialmente prevista sólo se ha entregado hasta ahora a los solicitantes cerca de 3 mil millones de pesos; es decir, ni la tercera parte de lo prometido, subrayando que “el tiempo pasa y todo sigue igual para los chiquitos”.

Agregó que Medina, durante su campaña electoral, prometió realizar cambios importantes, pero que las transformaciones anunciadas no se han producido, sustituyéndolas por el “clientelismo dominical” de las visitas presidenciales.

Explicó que el mandatario se ha convertido en un Santa Claus cada domingo visitando comunidades, donde anuncia ayudas para solucionar problemas.

Agregó que con esta práctica el presidente Medina le envía un mal mensaje a la sociedad, en el sentido de que sólo la visita personalizada del Presidente de la República es la que permite solucionar los problemas, dándole prioridad a la dádiva presidencial por encima del derecho que le asiste a todos los ciudadanos de vivir una vida decorosa.

Dijo que de esta manera el gobernante reduce la efectividad de la aplicación de las políticas públicas a su persona, no a un plan institucional. “Para resolver un problema en una comunidad “debe llegar el Santa Claus Medina, y esto es clientelismo”, expresó.

Dijo que en las comunidades visitadas, la gente se siente bien “porque a nadie le amarga un dulce”, pero que este tipo de acciones no resuelve los problemas de los dominicanos y las dominicanas ya que, a final de cuentas, para la mayoría “la vida sigue igual”, como dice una canción.

Puig señaló, asimismo, que es un error de la actual gestión gubernamental insistir en instalar plantas de generación de electricidad a carbón, ya esta inversión además de resultar más costosa que otras opciones es sumamente dañina para el medio ambiente y para salud de las personas.

Se refirió al hecho de que los defensores de las plantas a carbón ponen de ejemplo a China, obviando que hoy los chinos que viven en las ciudades industriales se ven obligados a colocarse mascarillas para evitar enfermarse por contaminación, lo que muestra los negativos efectos de la adopción de esta tecnología que el mundo está llamado a abandonar.

“Porque los chinos lo hayan hecho mal, los dominicanos no tenemos que hacerlo mal”, acotó.

El político y sociólogo indicó también que el mandatario prometió, durante su campaña proselitista, que sometería a la justicia a los funcionarios señalados de cometer actos de corrupción haciéndose eco hasta del rumor público. Precisó que el presidente de la República no ha sido consecuente con sus palabras, ya que ha hecho caso omiso a las múltiples denuncias de corrupción contra altos funcionarios del gobierno que han sido formuladas a través de diversos medios de comunicación.

Las declaraciones de Max Puig fueron formuladas al ser entrevistado éste por Cristian Jiménez y Geomar García en el programa A Diario que se transmite por Digital 15.