VERGUENZA CONTRA DINERO

POR HUMBERTO SALAZAR.-

En el día de hoy en toda la línea fronteriza los dominican@s cerrarán por voluntad propia el mercado binacional que se realiza los lunes de cada semana.

Fue penoso, bochornoso y humillante, lo ocurrido el pasado viernes en la frontera, cuando militares haitianos rompieron y tiraron al rio Masacre, todos los huevos que habían sido adquiridos por sus compatriotas en la República Dominicana.

Es una humillación a este país, el que las autoridades haitianas le hayan dado largas a un tema que no resiste el más mínimo análisis.

Frente a lo que no ha sido mas que una ¨confusión¨, según la propia ministra de salud de Haití, todavía a una semana persiste la prohibición de venta de huevos y pollos hacia Haití y el gobierno del vecino país se ha burlado de las autoridades dominicanas.

La comisión de funcionarios de alto nivel, nombrada por el presidente Danilo Medina, fue objeto de un trato descortés y se le hizo una promesa de solución la cual no se cumplió.

Ante esta andanada de ofensas innecesarias y manejo agresivo en nuestra contra, los comerciantes dominicanos decidieron hoy no dejar pasar ningún tipo de mercancía por la frontera.

Como no quieren que pasen los huevos y los pollos, tampoco pasarán pastas alimenticias, leche, agua, plásticos y un sinnúmero de productos que suplen el mercado haitiano y evitan que ese país, un verdadero estado fallido, se muera de hambre.

Por fin, alguien se pone los pantalones y nos hace sentir orgullosos de ser dominicanos.

RECIPROCIDAD DIPLOMATICA

Los que conocen el mundo de la diplomacia saben que en este campo de las relaciones entre estados, se ejerce el llamado principio de la reciprocidad.

Esto significa que un país tiene el derecho de tomar acciones iguales a las que toman los países con los cuáles tiene relaciones diplomáticas dentro de su territorio.

Cuando el presidente Danilo Medina nombró una comisión para viajar a Haití, a tratar el tema de los productos avícolas, compuesta por tres ministros del gobierno dominicano, fue recibida por sus pares del vecino país.

No se trató el tema con el Primer Ministro Haitiano, ni tampoco hubo una reunión con el presidente de Haití, el cantante de combo Michel Martelly.

Entonces, tampoco deberían ser recibidos por el presidente dominicano, unos legisladores haitianos, ni tampoco ninguna comisión de ese país, ya que disminuye la figura de nuestro primer mandatario y no se cumple el principio diplomático de la reciprocidad. Una dosis de nacionalismo y patriotismo es necesaria en este caso.

SOÑAR NO CUESTA NADA

Imaginémonos que se envían miles de nuestros soldados a la frontera y la sellamos de modo que no pase ni un alfiler desde nuestro territorio hacia Haití.

Imaginémonos que ese sello militar tampoco permite que pase nadie desde Haití hacia la República Dominicana.

Vamos a Imaginarnos que las parturientas haitianas tienen que dar a luz en hospitales que no existen de aquel lado de la frontera.

También nos vamos a imaginar que como no se les permite pasar, tampoco se les da servicio, a los miles de enfermos haitianos que usan nuestros médicos y nuestros medicamentos, comprados y pagados con nuestros impuestos.

Imaginémonos que la Dirección de Migración hace operativos masivos de captura de indocumentados haitianos en el país y los deporta hacia su territorio cumpliendo con la ley.

Nuestra imaginación es tan fértil que veríamos de inmediato la disposición de miles de plazas de trabajo en la industria de la construcción e industria agrícola, las cuáles seguirán funcionando con mano de obra dominicana.

Vamos a imaginarnos un escenario ideal donde nuestra gente no se enferma de malaria, sida, tuberculosis, cólera y otras enfermedades infecto contagiosas que tienen su origen en la insalubridad en que vive el pueblo haitiano.

Ese escenario imaginario fue por el lucharon y dieron su vida los fundadores de nuestra nacionalidad, si no hubieran tenido la suficiente imaginación, habláramos creole y viviéramos en la forma infrahumana como viven los habitantes del otro lado de la frontera.

Soñar no cuesta nada.

COMER ES PRIMERO

En la toma de posesión del presidente Leonel Fernández del año 2004, este popularizó la frase ¨comer es primero¨ y describió lo que sería un programa del gobierno dedicado a proveer subsidio para la alimentación de miles de dominicanos que en ese momento sufrían las consecuencias de la crisis heredada del gobierno pasado.

La República Dominicana, como compromisaria de los acuerdos para cumplir las metas del milenio, está compelida al año 2015 en disminuir a la mitad el hambre y la desnutrición en nuestro territorio.

Pues en el día de ayer, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), reconoció en su sede en Roma a 38 países que cumplieron, según los estudios hechos por esta institución, la meta de disminuir a la mitad el hambre en sus territorios antes del 2015.

La vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández, quien también es embajadora de la FAO, recibió, a nombre del gobierno, la certificación que confirma que en el país se redujo el hambre y la malnutrición, impactando positivamente en mas de un millón de personas, a través de políticas agroalimentarias y de protección social que han garantizado la seguridad alimentaria y nutricional a los dominican@s.

Los programas Comer es Primero, de alimentación escolar, de políticas de apoyo a la intensificación productiva y los apoyos nutricionales implementados por el estado a favor de la población, han sido certificados por la ONU como efectivos y eficientes.

Las palabras de la vicepresidenta en Roma lo dicen todo: ¨este logro del país, es el resultado del esfuerzo conjunto de varias administraciones gubernamentales, de varias instituciones públicas y privadas y organizaciones de la sociedad civil, que trabajan cada día para que todos los dominicanos puedan comer mas y mejor, por lo cual nos sentimos sumamente orgullosos¨.

Felicidades al país y a las autoridades.