El Conde muere lentamente víctima de los robos, drogas y prostitución en la zona

POR VANESSA DURAN.-

La presencia de turistas y el dinamismo comercial que caracterizan el ambiente diurno de la histórica calle El Conde, enclavada en la Ciudad Colonial, cambian por una realidad muy distinta en horas de la noche.

Inseguridad, comercio sexual, enfermos mentales deambulando y drogadictos, conforman el lastimoso panorama que impera en esta tradicional arteria comercial y turística de Santo Domingo en horas nocturnas, lo que agravado con el decaimiento general de las actividades de los negocios.

Louidji Dieujuste, camarero y bartender del café restaurante Pasta Pasta, abierto de 8:30 de la mañana a 10:30 de la noche, dice que “hay más delincuentes en esta calle que turistas”.

Resalta que allí no hay nada que motive a la gente a visitar el lugar, “y esto hace que la cosa esté muy floja, razón por la cual las tiendas están cerrando sus puertas”.

Insiste que hay mucha delincuencia y pone de ejemplos los robos de que son víctimas los turistas extranjeros y dominicanos que visitan esa arteria comercial.

Hace unos días –narra Dieujuste- que en el mismo restaurante le arrancaron la cadena a un turista y la gente que vio aquello se quedó boquiabierta, porque fue delante de todo el mundo.

Otra persona entrevistada, cajera del restaurante Mundo Artesanal, cuenta queesos robos y asaltos está alejando a los turistas y a los propios dominicanos.

Dicen que hay vigilancia de Politur, pero que parece que la cantidad de agentes no son suficientes.

Mientras que el vendedor José Luís Santana habla de la prostitución que ha hecho mucho daño a la zona.

Agregó que se ve una prostitución muy activa en horas de la noche, tanto de mujeres como de hombres.

Pedro Antonio Cuello Martínez, vendedor de artesanía, resalta que el ambiente del Conde es diferente a lo que era antes.

En ese sentido explica que tiempo atrás “esto era una zona sana, la gente venía a recrearse, hacer turismo, pero ya no, ahora es zona apache”.

“Aunque a decir verdad, ha habido una mejoría con la vigilancia de Politur”, agregan.

Otros problemas de la zona es el mal olor que expiden las alcantarillas y los apagones.

A pesar de todo, El conde conserva su encanto urbanístico y turístico por el rico pasado que atesora y porque es punto referencial de la Zona Colonial y del Santo Domingo histórico.