Christiane K., de 28 años, fue sentenciada a la pena más grave en Alemania por el asesinato de sus hijos en septiembre de 2020.
Melina, Leonie, Sophie, Timo y Luca, tenían entre 1 y 8 años cuando sus cadáveres fueron descubiertos en el departamento de la familia.
De acuerdo con los informes, la tragedia que conmocionó al país se desató luego de que Christiane descubriera una fotografía de su exesposo, con quien llevaba un año separada, con su nueva novia.
La “decepción, cólera y desesperación” fue lo que motivó a la mujer a actuar en contra de sus hijos, de acuerdo con lo expuesto por la fiscalía y teoría que fue apoyada por el juez del tribunal de Wuppertal, detalla Univision.
La fiscalía destacó que “su vida cambió profundamente en ese momento”, no pudo soportarlo y quiso “castigar” al padre de sus hijos. Incluso, según la investigación, Christiane le escribió a su expareja para decirle que nunca volvería a ver a sus hijos, antes del fatídico día.
Fue el 3 de septiembre de 2020 cuando la mujer drogó a sus hijos con sus bebidas durante el desayuno en el departamento familiar de Solingen, cerca de Wuppertal.
La intención de Christiane era que sus hijos se durmieran, luego preparó el baño con juguetes y los fue despertando uno a uno para llevarlos hasta ahí, en donde los asfixió.
Ese mismo día, los cuerpos de los niños, tres niñas de 1, 2 y 3 años y dos niños de 6 y 8 años, fueron descubiertos. Mientras tanto, la mujer fue encontrada malherida en una estación del tren en la ciudad vecina de Düsseldorf, tras lanzarse a las vías.
El hijo mayor de la mujer, de 11 años, sobrevivió a la tragedia familiar porque estaba pasando unos días en la casa de su abuela.
Inicialmente, Christiane se declaró inocente asegurando que un hombre enmascarado entró a su departamento para matar a sus hijos, pero no hubo ninguna evidencia que probara esa afirmación.
